
Cae la noche, rompe la furia y el deseo,
me flagelo, manzana mordida, veneno mortal,
quiero comer y pecar,
así me muera, así me asfixie,
lo que quiero es dormitar,
en una nébula, donde sea que estás.
Un mutismo, que me rodea,
quiero penetrar y no me dejas,
la intriga, la maldita sospecha,
me hipnotiza y me quebranta por demás.
Corroída la razón, romántica y maltrecha por demás,
es un acertijo, no encuentro las palabras,
ni el camino ni el desván, pura soledad,
jugando a quemarme,
perdiendo mi libertad, esa que tú no codicias,
y usas como quieres, te largas y te vas.
Así lo he permitido, así me has mutilado,
sábanas retorcidas, piernas afligidas, delirando,
tus murmullos, los míos, tus palabras obscenas,
lujuria, pleno morbo, me sucumbes y me destierras
pero mas que nada quiero y añoro que me sientas.
Y aquí Yo sangrando por lo que me das a probar,
y es que me gusta,
y es que me place tu crueldad,
besar tus manos y sudar tu sangre,
es que deseo y me apetece
sucumbir en este desastre.