domingo, 16 de mayo de 2010

Ansiando Ónix



Mirada felina embriagante,
labios cosechando bríos y frenesí,
en un laberinto ínfimo me tiene este sentir.

Clavada en ojos ónix,
dormitando eternamente en el mordisco,
aun no lo siento pero profundiza mis sentidos.

Una quimera, debió ser pasajera,
no logró despojar un éter suspirar.

Hados bordearon mi cama,
raptada mi conciencia,
amortiguaron lo moral,
perdida en el prado,
buscando ansiar.

Ónix marca el paso,
labios carnosos y carmesí
deliró, deseo sucumbir,
pura demencia, sometida,
un sublime y arrogante pensar.

Anclada en tu mirada,
desnudez labial,
un cúmulo de convulsiones
que vienen y van,
no paro de suspirar.

Saborear me apetece,
alimentarme de tu aliento,
morder hasta sangrar,
rogando por lo incierto,
eso, que me nutre por demás.

martes, 11 de mayo de 2010

Sombra San Juanera




















Refugias y escondes la historia,
los cañones y tesoros de mi tierra,
a ti hoy te celebro con lo opaco de mi esencia,
voy haciendo estampas contigo bordeando mi silueta,
tus adoquines cubriendo la nostalgia, la penumbra y la hoguera
bajo los hieros y murallas voy descubriendo las quimeras,
con bríos de emociones embriagando el caudal,
en ti me refugio, buscando luz y alejando la soledad!

lunes, 3 de mayo de 2010

Ojos Negros


















Penetrando ojos oscuros que lloran la patria,
esos que gritaban: ¿dónde esta mi alma?
tinieblas marcaron las manecillas del
reloj fantasmal de la vida,
corta de aliento y boca a secas,
lamiendo los rastros de lo que fue mi vereda.

Ojos oscuros que embrujan,
mil y un sinsabores, noches sin alba,
costillas partidas, plena nostalgia.

Arrastrando mi cordura,
sentada en la nada,
mis pies colgando, un hilo a distancia.

Ojos oscuros que clavan mi aura,
manos mutiladas y faltas de esperanza.
¿a dónde camino? no veo la llama,
en un agujero temblando, perdida, ahí siento.

Ojos oscuros, miro y me aterro,
en ti sólo veo un espejo.

domingo, 2 de mayo de 2010

Nuestros besos...

En un frenesí de versos sin capitán,
un velorio por demás,
gotas de lluvia pintan mi cintura,
la que no sienten las manos tuyas.

Es un eco que viaja sin sentido,
tus labios como boomerang no encuentran los míos,
eterno es el viaje y la penitencia,
emoción anclada que vuela.

Algodones nubescos pintan la ruta,
suaves y aterciopelados,
tal como tus crespos,
quiero ungir mis dedos en ellos,
almíbar es lo que deseo.

Es que no encuentro la mecha,
no hay llamas ni caña para la pesca,
el mar está inhabitado,
un soberano desierto,
ahí en los restos de Atlántida están nuestros besos...